*ENCIENDE UNA LUZ*

 PALABRA DEL DIA

“Regeneración, liberación, ayuda y cambio para mantener a distancia un periodo de estrés que amenaza tu equilibrio.

Es una segunda oportunidad para conseguir tus objetivos produciendo el cambio como una buena ocasión de prueba, para superar mediante la luz la energía que otorga el resultado sostenido con esfuerzo cuando se afronta con ganas y sabiduría una prueba en el tiempo para obtener el éxito completo a través de la luz”.

Salmos recomendados: 112, 103, 56, 31, 37, 70, 52

Palabra Clave: “Enciende una Luz”

Es un estudio que otorga tolerancia y paciencia para ayudar a examinar detenidamente los problemas de los demás a través del secreto de encender una luz porque asegura un descubrimiento interesante y profundo acompañado de la expresión verbal.

Neutraliza los problemas para ti mismo y para otros, es un secreto rápido y mucho para ponerte en armonía y cambio rápidamente en tus fallos.

Enciende una luz es cuestión personal que la persona expresara sus sentimientos y problemas para recibir la ayuda que necesita.

Es una clarificación que libera los aprisionamientos que no son fiables.

Tiene la capacidad de curarte y curar a los demás cuando se sienten perdidos y prisioneros de sus propias situaciones.

Si te sientes haber perdido la dirección y sientes la incapacidad de actuar y de confrontar la situación enciende una luz en ese momento para que sientas lo maravillosos y el resultado alumbrado que cambiara tu dirección.

No te des la espalda a ti mismo estudia y escucha los consejos que el universo te envía porque aun falta mucho por interpretar.

Si sientes un estado psicológico muy pesado, sentimientos de aprisionamiento, depresión y abandono enciende una luz y reactiva el contacto con lo divino y se parte de el,

Es una fuerte atracción hacia los misterios que desbloquea, evita y paraliza a tiempo cualquier contratiempo que se presente en la vida.

Es un profundo contacto con la dimensión espiritual y una cura preventiva en la esfera que viene a ti justo cuando creías  que todo para ti a terminado y que la vida no tiene sentido.

Enciende una luz y purifícate através de su fuego de energía y poder y has un contexto con la dimensión espiritual.

Tu optimismo y pensamiento te garantizara una vida que promoverá el cambio afortunado que tú desees.

Si quieres ser una persona feliz, serena y positiva has el cambio para mejor y acepta con serenidad a tu destino ya que es tu propio papel de estudio personal, si conoces tu destino no trates de evitarlo porque el cambio que le des te puede traer fuertes crisis personales.

Encender una luz es un espíritu que se refleja en su cuerpo que es armonioso y que su energía circula sin ningún impedimento, con su armonía de energía profunda y agradable disfrutaras básicamente con docilidad plena para que te sientas feliz, satisfecha y libre.

Concede equilibrio, salud, longevidad y suscita habilidades terapéuticas de salud, recuperación y reequilibramiento fuerte para fluir con calma el equilibrio de la vida de las personas.

Una luz te protege e ilumina tu camino de sucesos imprevistos.

Enciende una luz através de una vela puede ser blanca o el color de tu preferencia menos los colores oscuros y mantén a diario su energía mística para transformar y controlar todas las situaciones externas y con iniciativas peligrosas, la puedes acompañar con el salmo 23.

Revélale a la luz que es lo que deseas purificar en ese momento si es protección, curación o una ayuda lo que tu quieras enciéndela y mantén el tono energético durante todo el periodo de tu existencia personal para el cuidado y para que te sientas perfectamente cómoda, valiente y fuerte en la vida.

SALMO 23

El Señor es mi pastor; nada me faltará.

 

En lugares de delicados pastos me hará yacer:

Junto a aguas de reposo me pastoreará.

 

Confortará mi alma;

Guiarme por sendas de justicia por amor de su nombre.

 

Aunque ande en valle de sombra de muerte,

No temeré mal alguno; porque tú estarás conmigo:

Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.

 

Aderezarás  la mesa delante de mí, en presencia de mis angustiadores:

Ungiste mi cabeza con aceite: mi copa está rebosando.

 

Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida:

Y en la casa del Señor viviré para siempre.

 

Enciende una luz

Autor: *Carmen Zàrraga*

Enciende una luz