El Divino niño Jesús protege, ayuda y enseña a que todos comprendamos a aceptar nuestros errores y pecados para regenerarnos con los cambios como una trasformación necesaria que nos obliga a todos a volver a ponernos de pie después de haber cerrado una puerta y dar paso a la nueva.
Él recibe las ofrenda y los apoya con dignidad a todos sus devotos y devotas que acuden a él para que los entienda en sus problemas tales como: sufrimientos, errores cometido, pecados, pedir perdón, enfermedades y hasta piden por el fin de su ciclo de vida (muerte).
Muchas personas hacen sacrificios dolorosos para poder obtener su ayuda algunos apartan dinero, beneficios y miles de cosas más y no es así.
Hay una manera de llegar a él ¿Cómo? con bondad, paciencia, amor y responsabilidad sin quejarte de tus dificultades cotidianas así recibirás la ayuda importante de su gracia a través de las comunicaciones que tú facilites con el Divino niño.
Su apariencia física es agradable y armoniosa, delante de la gente aporta mucha claridad abiertamente para que todos sientan amor en ese momento es como algo paranormal muy difícil de explicar y entender su punto de referencia.
Un amigo fiable, consejero,
Una ayuda celestial que inspira respeto, ternura, afecto y confianza;
Un vínculo tierno y afectuoso de la vida;
Un niño celestial que viene del cielo;
Un rey del supremo celestial, lo máximo,
Un amor;
Un niño atento sensible, dinámico y carismático que se implica activamente por el bienestar de los demás.
Su corazón se expone a recibir la ayuda ofrecida y recibida espiritualmente para dominar y ayudar a todos en sus problemas de la vida cotidiana.
Su magia, curación y misterio está en su propio mundo espiritual inmóvil cerrado en su dimensión y su poder y fuerza esta al tocar su imagen frente a él con tu mano atravesaras el más allá de su dimensión espiritual.
Autor: Carmen Zàrraga